Por Pía Ibarra Y.
Después de largas jornadas, la cumbre sobre el cambio climático COP26 en Glasgow, llegó a su fin tras intensas negociaciones.
¿Cuáles fueron los acuerdos clave? ¿En qué aspectos faltó avanzar? Revisa en esta nota algunos de los puntos destacables.
Se reconoció al carbón como responsable de la crisis climática:
Según el acuerdo final de la COP26, se estableció el compromiso por avanzar hacia una “disminución gradual” del carbón, sindicado como uno de los grandes impulsores de la crisis climática.
Sin embargo, al contrario de lo que solicitaron científicos de todo el mundo en el reporte climático “Código Rojo para la Humanidad“, que se publicó en agosto, no se llegó al compromiso de eliminar su uso.
Con el acuerdo del Artículo 6, se dio por cerrado el Libro de Reglas del Acuerdo de París:
Según Uno.Cinco, el Artículo 6 sobre Mercados y No Mercados del Carbono es una cooperación voluntaria para que las empresas o países compensen o mitiguen sus emisiones, pagando a otra entidad (país o empresa) para que reduzca las suyas.
Este punto estaba pendiente desde las anteriores COP24 y COP25, por lo que la importancia de su aprobación recae en que se pasó de las COPs de la reglamentación a las de implementación.
Líderes de más de 100 países, que representan casi el 85% de los bosques del mundo, prometieron frenar la deforestación para 2030:
Como indica BBC, “los árboles pueden absorber grandes cantidades de dióxido de carbono (CO2), uno de los gases clave de efecto invernadero que contribuye al calentamiento global. Así que, la eliminación de la deforestación se considera vital para combatir el cambio climático”.
Si bien esta es una iniciativa que está mejor financiada que otras anteriores, no quedó claro de qué manera se velará por su cumplimiento.
Se estableció una nueva fecha para el pago de 100 mil millones de dólares de finanzas climáticas:
Hace diez años los países desarrollados sellaron el compromiso de entregar 100 mil millones de dólares al año a los países en vías de desarrollo, para mitigar los daños del cambio climático y hacer frente a esta nueva realidad.
Para 2020, la meta no estaba cumplida, por lo que se estableció una nueva fecha: 2022.
Estados Unidos y China se comprometieron a impulsar la cooperación en temas climáticos a lo largo de la próxima década:
Ambas potencias llegaron a acuerdo en materia de Emisiones de metano, transición hacia energías limpias, y descarbonización.
Asimismo, su declaración indica que trabajarán juntos para alcanzar la meta de un incremento máximo de 1,5 grados.
En otros años, China no había aceptado abordar las emisiones de carbón en el corto plazo, por lo que, según BBC, esta declaración se toma como “un reconocimiento de la necesidad de tomar acción urgente.
Más de 100 países acordaron reducir en un 30% las emisiones de metano para 2030:
“El metano es uno de los gases de efecto invernadero más potentes, y actualmente es responsable de un tercio del calentamiento causado por humanos. La mayoría está producida por actividades como la cría de ganado y eliminación de desechos”, señala BBC.
Sin embargo, China, Rusia e India, tres gigantes en cuanto a las emisiones de metano, no adhirieron al programa, pero se espera que lo puedan hacer más adelante.
¿De qué manera se fiscalizará que los países cumplan sus promesas?
Una de las grandes críticas que ha enfrentado la COP26 es que los compromisos que se adquirieron, mayoritariamente, tendrán que depender de la “autofiscalización” de los países, puesto que son muy pocos los que están haciendo que los acuerdos zanjados en este encuentro sean legalmente vinculantes.