Por Pía Ibarra Y.
Se decidió a estudiar Ingeniería Civil Eléctrica en la Universidad de Santiago de Chile, en medio de un curso donde los hombres eran amplia mayoría. Cuenta que nunca tuvo problemas con sus compañeros varones por el hecho de ser mujer, pero sí recuerda profesores que naturalizaban ciertos sesgos de género.
Más tarde, nació su pasión por la educación sin estereotipos y el incentivo a las niñas a participar en el mundo “STEM” (acrónimo que sirve para designar las disciplinas académicas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), y reunirse con otras mujeres para hablar de sus experiencias.
Hoy, Consuelo Fertilio lidera la organización “Mujeres Ingenieras”, que busca visibilizar, conectar, potenciar y apoyar al género en sus objetivos profesionales.
¿Cuál es el estado actual de las mujeres en el ámbito STEM?
Está bastante enfocado en ciertos sesgos, segregación horizontal y vertical, y los estereotipos, que muchas veces nos juegan en contra solo por el hecho de ser mujeres, independiente de las capacidades que tenemos y eso es lo que hoy día queremos derribar.
Hay muchas industrias que tienen una forma de hacer las cosas que ha sido “la forma que siempre lo han hecho” y el llevar a mujeres y contar con nosotras en equipos diversos es todo un desafío. Es un desafío derribando sesgos, es un desafío en liderazgo, es un desafío el que lo tomen como un punto estratégico, valórico y que no sea solamente un tema impositivo y que no le vean el valor en ciertas áreas en que están acostumbrados a tener menos presencia femenina.
Las mujeres podemos tener cualquier cargo. No hay ni carrera ni industria ni cargo que tenga algún género definido. Hay que cambiar la mentalidad, hay que trabajar por crear equipos mixtos, e incorporar a los hombres a este cambio. Las organizaciones tienen que tomar esto como un cambio valórico y también estratégico.
¿Ustedes han generado algún catastro de la situación de las mujeres STEM en organismos públicos y privados?
En las industrias en general hay un poco más de un 40% de participación de las mujeres. Pero si hacemos un zoom en el porcentaje de industrias más masculinizadas, se reduce drásticamente y bordea el 20 o 25%. Si eso lo llevamos a la primera línea de las gerencias y directorios, esto baja dramáticamente a un 11% y un 8% en promedio, con lo cual te dice que efectivamente tenemos que hacer un trabajo en estas áreas y específicamente en estos cargos.
A nivel de políticas públicas hoy en día contamos con una norma que no es obligatoria, pero existe, que es la norma 3262 de equidad y conciliación. Hoy hay 29 organizaciones a nivel nacional que la aplican y esperamos que haya un mayor impulso a las empresas y organizaciones para que tengan esta norma como parte de su cultura.
Además, está en el Senado, en una de las comisiones, una ley para tener una cuota de género en el porcentaje de directorios de empresas públicas y privadas con al menos un 30%, y hay otros países que ya la están aplicando, como Alemania, Colombia y los Países Nórdicos.
En este nuevo proceso de admisión, en algunas universidades como la Universidad de Chile se anunció un alza en los ingresos de mujeres a las ingenierías ¿Cómo toman ustedes esa noticia?
El año pasado las mujeres en ingeniería representamos el 28% en promedio del ingreso, con algunas carreras en que no llegábamos al 10%. Sin embargo, hay un hito bastante importante: por primera vez en la historia, una mujer lideró la nómina de quienes ingresaron a Ingeniería en la UChile. Entre 865 seleccionados, ella logró el primer lugar. Eso da cuenta que las carreras no tienen género, ni las industrias, ni los sectores, ni los cargos.
Tenemos que mover ese círculo virtuoso desde la educación: educar sin sesgos y entregar esta educación sin etiquetas, tanto para niñas como para niños.
Hay universidades que hoy tienen procesos de admisión que incentivan a las mujeres a ingresar al mundo STEM. ¿”Mujeres Ingenieras” ha tenido alguna participación?
Hoy son más o menos 10 universidades las que tienen planes y programas de ingreso especial para mujeres, y se dividen en dos tipos: uno con listas de espera preferenciales, y otros con ingresos directos a las carreras de ingeniería.
Lo que no sabemos, y nos gustaría acercarnos en las universidades para saber, es cómo son percibidas las mujeres en esta área. ¿Hay algún tipo de sesgo frente a sus compañeros o no? lo desconocemos. Pero sí sabemos que cada año estos ingresos se ocupan de una manera mayor y que se hacen tanto en la Región Metropolitana como en regiones, eso también es muy importante.
¿Qué mensaje le darías a mujeres, niñas y adolescentes en este nuevo 8M?
Que siempre crean en ustedes. Lo que ustedes quieran hacer en la vida, ustedes pueden y son capaces de hacerlo. Que sientan que los objetivos los pueden lograr. Que creen redes de apoyo, porque no estamos solas y hay muchas mujeres que, de manera muy natural, pueden apoyarnos, y nos apoyamos.
También que es importante tener una buena base técnica, pero sin duda el desarrollar las habilidades sociales es un punto que es fundamental. Que tomen su carrera con la importancia de cualquier proyecto.
Ustedes son el proyecto más importante, por eso tienen que quererse y creer en cada una de ustedes y sus potencialidades.
